Pirlo: El Aperitivo Tradicional de Brescia con Campari y Vino Blanco

El Pirlo es el aperitivo tradicional de Brescia por excelencia, ¡que no debe confundirse con el igualmente famoso Spritz Véneto! Desde la receta original hasta la versión moderna, hoy te explicamos cómo se prepara el auténtico Pirlo en Brescia.

Sin quitar mérito a sus primos vénetos, el Pirlo Bresciano no es solo una bebida: representa toda una filosofía del aperitivo. Más allá de si nació antes que el Spritz, su diferencia fundamental radica en que en Brescia el Pirlo se vive como un ritual social. Es el símbolo del encuentro vespertino: conversaciones entre amigos tras la jornada laboral, acompañadas de tentempiés como aceitunas, patatas fritas o pequeños bocados salados. Un Pirlo siempre se sirve con comida ligera, lo que lo hace ideal como preludo a la cena.

Aunque la receta actual difiere de la original (adaptándose a los gustos modernos), su esencia permanece. Para una versión más alcohólica: aumenta proporcionalmente las cantidades de Campari (o Aperol) y vino blanco fermo (seco y sin gas), reduciendo el agua con gas. Si buscas innovar, prueba el Pirlo Misto: mitad Campari y mitad Aperol.

Ingredientes clave:
– Campari: Bitter italiano imprescindible (si no encuentras, usa Cynar o algún bitter herbáceo local)
– Vino blanco fermo: Seco y sin gas (sustituye con vinos españoles como Verdejo o Albariño si es necesario)
– Seltz/agua con gas: Para dar efervescencia
– Rodaja de naranja: Tradición moderna (originalmente usaban limón)